El porqué y el propósito.
¡Qué hongo, Emprendedores! En una época donde el sueño de volar parecía inalcanzable para muchos, Orville y Wilbur Wright, armados con poco más que su determinación y un propósito claro, cambiaron el curso de la historia. A diferencia de su principal competidor, Samuel Pierpont Langley, el cual tenía acceso a fondos significativos, conexiones con las élites intelectuales y políticas y una vasta experiencia en el campo, los hermanos Wright no eran los más equipados financieramente, ni los más reconocidos en su campo pero tenían algo que Langley no tenía: un inquebrantable "Porqué". En su libro, Start with Why, Simon Sinek utiliza esta historia para demostrar cómo los líderes y las organizaciones que entienden y comunican claramente su "porqué", pueden inspirar acción, fomentar innovación y construir equipos que logran lo imposible. Además, el autor explica cómo las organizaciones más inspiradoras utilizan el “Círculo Dorado”; es decir, trabajan desde adentro hacia afuera, empezando con un porqué, seguido por el cómo y finalmente el qué.
Este libro ha sido de gran inspiración para mí, en esta nueva aventura. Me ayudó a definir mi “porqué” y mi propósito como Legalbeard. Con base en mi experiencia y conocimiento, considero que estos son ingredientes esenciales en la receta para lograr que una persona y su emprendimiento logren su máximo potencial (se los recomiendo ampliamente).
Antes de comentarles por qué creo esto y que también estos se trasladan a su empresa para crear el Círculo Dorado, empezaré con las definiciones de cada palabra:
Propósito: Es el objetivo que se pretende alcanzar.
Porqué: Es la motivación subyacente o la causa más profunda que nos impulsa a lograr ese objetivo. Se refiere más a la esencia, valores y creencias de cada uno.
Razones para definir tu porqué y tu propósito:
1) Te motivan y te hacen más resiliente:
Un propósito y un porqué bien definidos proporcionan una fuente constante de motivación. Cuando los tiempos se ponen difíciles, recordar el porqué detrás de tus acciones te ayuda a mantenerte enfocado y resiliente. Es lo que te impulsa a seguir adelante, incluso cuando enfrentas obstáculos.
2) Te dan dirección y claridad:
Estos actúan como una brújula que guía tus decisiones y acciones. Saber exactamente porqué haces lo que haces te permite tomar decisiones alineadas con tus valores y objetivos. Esto no solo facilita la toma de decisiones, sino que también asegura que tu emprendimiento se mantenga en el camino correcto.
3) Te inspiran y conectan:
Te ayudarán a inspirar a otros a unirse a tu causa. Ya sean empleados, clientes o socios, las personas se sienten atraídas por aquellos que tienen un porqué y un propósito claros. Esto crea una conexión emocional más profunda y lealtad hacia ti y tu emprendimiento.
4) Disparan tu creatividad:
Cuando tu por qué y tu propósito son claros, estás más dispuesto a pensar fuera de la caja y buscar soluciones innovadoras. El porqué te impulsa a encontrar nuevas formas de alcanzar tus objetivos y superar desafíos. Esto fomenta un ambiente de creatividad y mejora continua.
5) Te sientes satisfecho personalmente:
Saber que estás contribuyendo a algo más grande que tú mismo te da un sentido de logro y propósito en la vida.
El Círculo Dorado
En Start with Why, Simon Sinek introduce el concepto del Círculo Dorado. Una poderosa herramienta para entender cómo los líderes y las organizaciones pueden inspirar a otros. El Círculo Dorado se compone de tres niveles:
Porqué: Este es el núcleo del Círculo Dorado y la razón fundamental por la que una organización existe. Se refiere a su propósito, causa o creencia.
Cómo: El proceso o los valores que distinguen a una organización. Es la manera en que se lleva a cabo el porqué. Los "cómo" pueden incluir metodologías únicas, principios operativos o ventajas competitivas.
Qué: Es el nivel más externo y representa los productos o servicios que una organización ofrece. Es lo que haces.
¿Qué impacto tienen una vez que permean en tu empresa?
1) Generan conexión emocional: La gente no compra lo que haces, si no el porqué lo haces. Esta conexión emocional fomenta la lealtad y el compromiso a largo plazo.
2) Inspiran y motivan: Inspiran tanto a tus empleados como a tus clientes. Los empleados que entienden y comparten estos, están más motivados y comprometidos. Los clientes, por su parte, se sienten atraídos por marcas que representan algo más grande que ellos mismos.
3) Te hacen diferente y atractivo en el mercado: En un mercado saturado, estos serán factores diferenciadores. Mientras que muchos pueden ofrecer productos similares, pocos pueden ofrecer uno que tenga un por qué bien comunicado.
4) Te guían al tomar decisiones: Actúan como una brújula que guía todas las decisiones estratégicas y operativas de tu empresa. Ayuda a mantener el enfoque y la coherencia.
5) Hacen que tu empresa sea resiliente y adaptable: En tiempos de crisis o cambio, tendrás una base sólida que te permitirá a tu empresa adaptarse sin perder su esencia.
Encontrar y vivir tu porqué y tu propósito es un proceso largo, difícil y doloroso. No hay atajos. No obstante, tendrás una brújula que te guiará para lograr tu máximo potencial y el de tu emprendimiento.